Regalos y más regalos.
En ocasiones los regalos son las pesadillas de los padres, sobre todo en Navidad, y Reyes. No se porqué en esta época los Reyes Magos y Papá Noel se vuelven locos y regalan juguetes "Difíciles de montar" (por decirlo de alguna manera suave).
Por ejemplo; ¿Qué pasa cuando el regalo es un castillo de princesa de 70 cm de alto y 50 de ancho (con sus minis complementos?. Pues que tardas un siglo en montar el juguete. Y menos mal que tenemos un cielo de hija que tiene calma y te ayuda a montar el castillo.
Aunque también están los regalos a los que llamo"regalos vendetta". Son aquellos que a tus hijos les encantan pero a ti te pasan por la mente la forma de devolverles el regalito.
Me explicaré mejor.
Me refiero al tipico tambor, a las típicas plastilinas que se endurecen en tu alfombra nueva, o esas pinturas (ya sean ceras, rotuladores o acualrelas son resistentes a todo ). Y os digo más, que aunque pongan que son para niños, que no manchas, y que son fáciles de quitar "no es verdad". Tú como limpiadora oficial se dichas pinturas sabes que "No".
Ni de cachondeo se quita el rotulador del tatuaje que se a hecho tu hija en el tobillo porque está "chulo", ni de cachondeo se quita la plastilina solidificada de los moldes "de cocina " que ha cogido tu retoño porque son más bonitos que los otros, y no os digo las pinturas con acuarela que pinta mi pequeña Velazquez. El único problema es que hay sitios en los que pintar no se debe y ni siquiera se puede.
Más bien porque tu pared es blanca por algún motivo. Y los suelos resbalan.
Pero yo me hago unas cuantas preguntas como montadora oficial de juguetes.
- ¿Por qué es más fácil construir por tu cuenta el castillo, que seguir las instrucciones?
- ¿Por qué nunca tienes tijeras a mano cuando, sabes de antemano que la muñeca de tu hija lleva protecciones de seguridad hasta en el pelo?
¿Por qué los Reyes Magos no son más listos y montan el dichoso castillo antes de que se levante tu hija y diga:"Qué chulo ¿puedo jugar ya?" Las muñecas se impacientan? .
Aunque la pregunta más importante es ¿por qué me hago estas preguntas ahora y no antes?. Ya que montando el castillo me rompí dos uñas, me dí cuenta deque casi era más grande que mi casa y de que antes de comprar ese tipo de regalo preguntemos si están montados o me voy a pasar un buen rato construyendo el castillo de mis sueños en miniatura. ¿Por qué ? Ni idea.
Pero el ¿por quién? Si lo sé, por ella.
Para terminar este artículo quiero que penséis que el mejor regalo, que le podemos dar a nuestros hijos es estar sanos mental y corporalmente. Ya que como padres siempre queremos proteger a nuestros retoños,. los queremos proteger de los niños que se burlan de ellos en el colegio, de las personas que se le acercan y son desconocidos, de los animales que no conoces y les puede morder. Vamos de miles de cosas que les pueden dañar.
Pero en realidad no nos damos cuenta deque si realente queremos protegerlos de todo lo malo que le puede ocrurrir en la vida, sólo tenemos que hacer una cosa. Cuidarnos a nosotros mismos. Porque si estamos fuertes y seguros de nosotros mismos como padres y personas no abrá quien pueda con nosotros.
Nadie podrá con nuestra pequeña gran familia.
S.G.M.
Por ejemplo; ¿Qué pasa cuando el regalo es un castillo de princesa de 70 cm de alto y 50 de ancho (con sus minis complementos?. Pues que tardas un siglo en montar el juguete. Y menos mal que tenemos un cielo de hija que tiene calma y te ayuda a montar el castillo.
Aunque también están los regalos a los que llamo"regalos vendetta". Son aquellos que a tus hijos les encantan pero a ti te pasan por la mente la forma de devolverles el regalito.
Me explicaré mejor.
Me refiero al tipico tambor, a las típicas plastilinas que se endurecen en tu alfombra nueva, o esas pinturas (ya sean ceras, rotuladores o acualrelas son resistentes a todo ). Y os digo más, que aunque pongan que son para niños, que no manchas, y que son fáciles de quitar "no es verdad". Tú como limpiadora oficial se dichas pinturas sabes que "No".
Ni de cachondeo se quita el rotulador del tatuaje que se a hecho tu hija en el tobillo porque está "chulo", ni de cachondeo se quita la plastilina solidificada de los moldes "de cocina " que ha cogido tu retoño porque son más bonitos que los otros, y no os digo las pinturas con acuarela que pinta mi pequeña Velazquez. El único problema es que hay sitios en los que pintar no se debe y ni siquiera se puede.
Más bien porque tu pared es blanca por algún motivo. Y los suelos resbalan.
Pero yo me hago unas cuantas preguntas como montadora oficial de juguetes.
- ¿Por qué es más fácil construir por tu cuenta el castillo, que seguir las instrucciones?
- ¿Por qué nunca tienes tijeras a mano cuando, sabes de antemano que la muñeca de tu hija lleva protecciones de seguridad hasta en el pelo?
¿Por qué los Reyes Magos no son más listos y montan el dichoso castillo antes de que se levante tu hija y diga:"Qué chulo ¿puedo jugar ya?" Las muñecas se impacientan? .
Aunque la pregunta más importante es ¿por qué me hago estas preguntas ahora y no antes?. Ya que montando el castillo me rompí dos uñas, me dí cuenta deque casi era más grande que mi casa y de que antes de comprar ese tipo de regalo preguntemos si están montados o me voy a pasar un buen rato construyendo el castillo de mis sueños en miniatura. ¿Por qué ? Ni idea.
Pero el ¿por quién? Si lo sé, por ella.
Para terminar este artículo quiero que penséis que el mejor regalo, que le podemos dar a nuestros hijos es estar sanos mental y corporalmente. Ya que como padres siempre queremos proteger a nuestros retoños,. los queremos proteger de los niños que se burlan de ellos en el colegio, de las personas que se le acercan y son desconocidos, de los animales que no conoces y les puede morder. Vamos de miles de cosas que les pueden dañar.
Pero en realidad no nos damos cuenta deque si realente queremos protegerlos de todo lo malo que le puede ocrurrir en la vida, sólo tenemos que hacer una cosa. Cuidarnos a nosotros mismos. Porque si estamos fuertes y seguros de nosotros mismos como padres y personas no abrá quien pueda con nosotros.
Nadie podrá con nuestra pequeña gran familia.
S.G.M.
Comentarios
Publicar un comentario