La verdad sobre chicos y chicas.

De siempre se ha sabido que los hombres y las mujeres somos diferentes, y que esas diferencias nos hacen sentirnos atraídos los unos por los otros.

En ocasiones pienso que vivimos en realidades distintas. Realidades que siempre se juntan  para formar algo maravilloso, pero que existen.

El otro día viendo un programa de televisión dijeron (científicamente comprobado), que mientras las mujeres veíamos hasta 7 rojos diferentes en una secuencia de gamas de color rojo. Los hombres con suerte ven tres, y como dice mi marido "si el rojo es rojo".

En ocasiones me da la sensación que hombres y mujeres, niños y niñas no hablamos el mismo idioma.

Por ejemplo; las mamás metemos con mucho cuidado a nuestros retoños en el mar, mientras que los papás cogen al retoño y se meten en plan bárbaro en el mar. Son tan brutos que los peces huyen de ellos.

Otro ejemplo; cuando tú hablas con tu marido, tu novio o tu pareja de un tema que es de interés para los dos, pero se evade de la realidad. Y ni os cuento la manera de pensar.
Hay veces que nosotras nos comemos más la cabeza que ellos. Mientras que nosotras pensamos en que no nos habla porque hay algo que no funcionan, ellos simplemente no piensan.

Otro ejemplo son las pequeñas diferencias entre las fiestas de cumpleaños de las niñas a las fiestas de cumpleaños de los niños.

Y os voy a contar una anécdota que aclarará lo que os digo:

Una amiga mía que tiene un niño y una niña de 5 años, unos mellizos encantadores. Hace unos meses decidió celebrar el cumpleaños en su jardín por todo lo alto. Con payasos, tarta gigante, castillo de goma. Vamos un fiestón (o eso creía ella).

Todo empezó con las invitaciones la niña quería una invitación rosa con unas hadas; y en niño quería sus súper héroes favoritos.
La niña quería que en vez de payaso hubiese una princesa disney cantando canciones de princesas; el niño que viniese spiderman para "jugar con él".
Con respecto a la tarta ni os digo. Ella una tarta de princesas y en que la tarta fuese un coche.
Así que como los pequeños no se decidían llegó a un acuerdo con ellos. Que los niños podían ir disfrazados de súper héroes y las niñas de princesas o hadas. Mientras mamá y papá elegirían la tarta de siempre , con el payaso de toda la vida y la musica típica que se ponen en las fiestas infantiles.

Llegó la fiesta y había princesas, hadas y súper héroes por todas partes. Las niñas se fueron a jugar a transformar a sus amigas en ranas y los niños a luchar entre ellos para saber quien era el más fuerte. Todo iba relativamente bien hasta que se empezó con la "guerra de globos", y en el momento de que un globo empapó el vestido de una princesa.

En ese momento fue cuando empezó a ser divertida porque niños y niñas se lo pasaron muy bien jugando juntos.

Por ese motivo pensar que las diferencias nos unen.

S.G.M.