Las noches.

Todo padre sabe que hay noches muy buenas en las que duermes toda la noche porque tu retoño duerme toda la noche, y al día siguiente estas como en una nube. Y noches terroríficas. Bueno en realidad son noches que tu hija no duerme bien y  os pasais la mayor parte de la noche vigilándola.

También es verdad que cuando tu hija empieza a hablar y a tener conversaciones en sueños. Tus no ches empiezan a ser un pico más raras, ya que si escuchas a tu hija que te llama, tú acudes. Pero si ves que está durmiendo de forma placentera te da una sensación de "si lo llego a saber".

Un día hablando con otros padres sobre las noches que le daban sus hijos. Empezaron a contar anécdotas que con permiso de ellos os voy a contar:

- Unos padres que tenían dos niñas pequeñas de 4 y 6 años, que dormían en el mismo cuarto. Y resulta que después de venir de un campamento de verano, se dieron cuenta los padres que pasaba algo raro. Cuando se acostaban al cabo de un rato se escuchaba como las pequeñas cantaban la canción de "la hormiguita" , al principio pensaban que estaban las hermanas tomándoles el pelo. Pero después de observarlas una noche se dieron cuenta de que estaban dormidas, y que se lo habían pasado también en el campamento que cantaban esas canciones y se complementaban una a otra. Mientras que una decía "tengo una hormuguita..." la otra decía "... en la barriguita".

- Otros padres que dormían plácidamente en su dormitorio con la puerta abierta. De  repente notaron como los miraban, era una sensación rara, cómo cuando en las películas de miedo algo te dice que te metas debajo de la sábana ( como si te protegiera algo) y algo en  tu interior te dijese "cierra los ojos y no mires". Pero miras.
Y cuando miraron observaron a una figura diminuta en el umbral de la puerta con los ojos abiertos.
Resulta que era su pequeña de casi cuatro años que estaba dormida, e inconscientemente se había levantado al servicio sola. Pero como tenía la costumbre de avisar a mama se había quedado en el umbral de la puerta todo el rato para ver si mamá se levantaba.
El susto fue grande pero se sintieron aliviados al ver que era su hija y no una cosa rara.
La verdad es que esa noche precisamente habían visto una película de terror japonesa.

- Me contaba unos tíos que tengo que sus hijas solían discutir a veces antes de irse a dormir por tonterías. Tenían 12 y 14 años (esa edad tonta) pero que hacían las paces y como si nada.
Entonces una mañana una de las niñas se despertó con un ojo morado y preguntándose en que lado de la cana se había dado. Bajo a desayunar y se encontró a su hermana con un moratón en el brazo.
Entonces a mi tío se le ocurrió ver que pasaba por la noche y vigilarlas por si fuesen sonámbulas. Se acostaron las niñas y sus padres se quedaron observando.
Resulta que los días que habían discutido y luego habían hecho las paces. Iba una a la cama de la otra dormida y sin darse cuenta una le daba un manotazo a la otra, y la otra un pellizco de respuesta. Se quedaron alucinados.
Así, que cuando los padres le contaron a las hermanas que encima eran intimas amigas lo ocurrido decidieron tomarse las tonterías menos enserio y esto hizo que disminuyesen los golpes.

Hay miles de historias curiosas por las noches. Si queréis compartirlas podéis hacerlo aquí.

S.G.M.